Digest

Búsqueda por: principio activo, grupo terapeutico, enfermedad o problema de salud, síntoma, tipo de medicamento, tipo de paciente, tratamiento, efectividad, seguridad,...

Anticuerpos inmunoterapia corticosteroides estreñimiento diarrea Metamizol riesgo cáncer de mama Estatinas prevención efectividad Diabetes antineoplásicos diclofenaco dosificación ibuprofeno nivolumab trastuzumab naproxeno medicamentos biológicos cardiovascular seguridad mortalidad adultos ancianos pediátrico nutrición infección fúngica interacciones acné EPOC hemorragia vacunas herpes gota lorcaserina AINE antiinflamarios antibióticos melanoma  

Selecciona cualquiera de los campos bajo el cuadro de Texto si quieres afinar tu búsqueda. Es posible seleccionar más de un campo. P. ejemplo: Título+Resúmen+Palabras clave 

Los trastornos tiroideos son frecuentes.El hipotiroidismo, p. ej. afecta al 6% de las personas mayores de 60 años. Los signos y síntomas son de aparición insidiosa y no existe un síntoma clásico, lo que hace difícil su detección. Aunque la mayoría de los médicos no preconicen la detección sistemática de las afecciones tiroideas, convendría efectuar un control de niveles séricos de TSH, cada 5 años a partir de los 35 años para detectar la enfermedad en una fase precoz. Algunos especialistas reservan el control para personas mayores de 60 años, que, por su edad, tienen más alto riesgo, ya que opinan que, en pacientes más jóvenes, sólo es necesario un control de TSH, si aparecen síntomas o signos clínicos de una enfermedad tiroidea. Por otra parte, la mayoría de los endocrinólogos aconseja un control sistemático para algunos subgrupos de riesgo. Estos comprenden las personas con otras afecciones autoinmunes (diabetes, poliartritis reumatoidea por ej.), aquellos con un colesterol total alto y los que padecen arritmias o insuficiencia cardíaca. El diagnóstico biológico de una afección tiroidea empezará por un control de la TSH, sin control de la T4 y, en caso de anomalía, se completará con otras pruebas. En personas de edad avanzada, el hipertiroidismo, si no presenta los síntomas clásicos de este trastorno, puede parecer un hipotiroidismo. No obstante, las principales manifestaciones de una afección tiroidea pueden resumirse así: HIPOTIROIDISMO: ataxia, bradicardia, intolerancia al frío, estreñimiento, disminución de la capacidad de concentración, depresión, sequedad cutánea, gran cansancio, cabello ralo, hiperlipidemia, hipotermia, disminución de la fertilidad, irregularidad del ciclo o menorragias, mialgias, edema periorbital, aumento de peso. HIPERTIROIDISMO: oligomenorrea, edema de las extremidades inferiores, disnea, intolerancia al esfuerzo, gran cansancio, heces frecuentes, bocio, disminución de la fertilidad, insomnio, debilidad muscular, nerviosismo, piel húmeda, taquicardia, mixoedema pretibial, temblores, modificaciones oculares (diplopia, fotofobia), pérdida de peso.
Palabras claves:
  • HIPERTIROIDISMO
  • RECOMENDACIONES
  • DETECCION
  • TSH
  • HIPOTIROIDISMO
  • TIROIDES
  • DIAGNÓSTICO

Nuestro objetivo es ofrecer a los profesionales de la salud una actualización constante sobre la información científica basada en la evidencia necesaria en su actividad profesional. 

Cada semana, a través de nuestra News Letter, estará informad@ sobre los nuevos artículos-resúmen que se incorporarán a la Base de datos.