DICAF

El ganciclovir endovenoso se utiliza para tratar las infecciones citomegalovíricas (rinitis, colitis y esofagitis) en pacientes con sida, en otros estados inmunodeprimidos y como profiláctico en pacientes transplantados. La implantación intraocular que libera ganciclovir ha sido más efectiva que la administración endovenosa en caso de transplante ocular, pero no es eficaz en otro tipo de transplante. El ganciclovir oral puede ser empleado como tratamiento de mantenimiento en pacientes con sida y renitis citomegaloviriásica, pero es menos eficaz que la formulación intravenosa. La continuación de tratamiento de ganciclovir oral o endovenoso con aciclovir oral reduce el riesgo de citomegaloviriasis en pacientes que han recibido un transplante ortotópico de hígado, incluyendo los receptores seronegativos de donaciones seropositivas. Es más eficaz el tratamiento con ganciclovir oral durante 3 meses en profilaxis de infección por citomegalovirus y enfermedad en receptores de transplantes de riñón seropositivos que el aciclovir oral. Si la administración es por vía endovenosa los efectos adversos más frecuentes son granulocitopenia y trombocitopenia, suele ser reversible. Si se administra simultáneamente con zidovudina, azatioprina o micofenolato de mofetilo puede aparecer mielosupresión grave. La neutropenia causada por el ganciclovir se puede tratar con los factores estimuladores de las colonias de granulocitos (GM-CSF y G-CSF). Otros efectos descritos son desprendimiento de retina en pacientes con retinitis citomegalovírica, fiebre, erupciones, flebitis, confusión, alteraciones hepáticas, disfunción renal, cefalea, toxicidad gastrointestinal y alteraciones psiquiátricas y convulsiones. La resistencia al ganciclovir puede asociarse a viremia persistente y enfermedad progresiva. El 20% de los transplantados de órganos sólidos que toman ganciclovir oral hacen resistencias.