Como terapia no farmacológica se puede recurrir a alternativas como acupuntura-hipnosis, terapia conductual-cognoscitiva, educación al paciente, apoyo de grupos de iguales, psicoterapia individual o de grupo y consejo asistido.
Dentro de la terapia farmacológica se disponen de distintos fármacos como son el acamprosato y naltrexona que actúan sobre el deseo de beber; el disulfiram y carbimida cálcica condicionan el impulso a tomar alcohol (debido a los efectos adversos); los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina o ansiolíticos (clormetiazol); también se disponen de fármacos como bromocriptina, tiaprida, buspirona y ondansentrón que están en fase experimental para esta indicación.
El acamprosato, de reciente aprobación, para el tratamiento de mantenimiento de la abstinencia en pacientes dependientes del alcohol tras la desintoxicación, debe utilizarse en combinación con terapia no farmacológica. Se ha observado que tras un año de haber finalizado el tratamiento se mantienen los efectos beneficiosos de este fármaco.
Los efectos adversos descritos por el acamprosato son diarrea, prurito, dolor abdominal, náuseas, vómitos, vértigo, confusión, cefalea, fatiga, recciones cutáneas y alteración de la líbido. Se desconocen los efectos adversos a largo plazo así como la comparación del perfil toxicológico con otros fármacos alternativos o interacciones farmacocinéticas con diazepam, oxazepam, fenobarbital, meprobamato, imipramina o disulfiram, fármacos utilizados habitualmente en la desintoxicación alcohólica.
Palabras claves:
- ALTERNATIVAS
- DISUASIVOS
- DESHABITUACION
- EFECTOS-ADVERSOS
- RECOMENDACIONES
NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.