Sesión Bibliográfica. 01 de Enero de 1999 (10)

Excepto en la neuralgia del trigémino, que responde bien a la carbamazepina, la farmacoterapia en el dolor neuropático es bastante decepcionante. Los pacientes con dolor neuropático no responden a fármacos antiinflamatorios no esteroideos y a menudo presentan resistencia o insensibilidad a los opiáceos. Generalmente se tratan de forma empírica con antidepresivos tricíclicos o inhibidores de la recaptación de serotonina o norepinefrina y anticonvulsivantes. Todos ellos son de eficacia limitada y presentan efectos adversos. Las lesiones neuroquirúrgicas desempeñan un insignificante papel y la neurocirugía está controvertida. Los bloqueos anestésicos locales pueden ser útiles pero de corto efecto. Los bloqueos más largos por inyección de fenol o crioterapia presentan el riesgo de deterioro funcional irreversible y no pueden ser estudiados en ensayos placebo-control. La administración epidural de fármacos como la clonidina, esteroides, opiáceos o midazolam es invasiva, presenta efectos adversos y su eficacia no ha sido suficientemente evaluada. No existe tratamiento preventivo del dolor neuropático ni un control específicamente establecido y predecible. La finalidad del tratamiento a menudo consiste en ayudar al paciente a enfrentarse a él mediante terapia psicológica u ocupacional. El desarrollo de terapias más efectivas está condicionado por la etiología, mecanismos y síntomas que, en el dolor neuropático, son de difícil comprensión. El conocimiento de los mecanismos que producen el dolor neuropático ha avanzado gracias a los estudios de laboratorio y a las pruebas sensoriales cuantitativas de los síntomas en pacientes. Estos estudios muestran si el dolor está mediado centralmente o periféricamente y qué tipo de fibras están implicadas. Para la evaluación de la progresión de la enfermedad y el resultado del tratamiento es importante el análisis de los síntomas, sin embargo, para definir la estrategia terapéutica, los síntomas aislados no son útiles porque no equivalen a mecanismos. Se necesitan medios diagnósticos específicos para averiguar los procesos patológicos que originan dolor en cada individuo, y ello nos será útil si estos mecanismos pueden ser tratados con terapia específica.
Palabras claves:
  • RECOMENDACIONES
  • AINES
  • CIRUGIA
  • ANTICONVULSIVANTES
  • ANTIDEPRESIVOS
  • OPIACEOS
  • EFICACIA

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.