Las tiazidas contrarrestan los efectos hipoglucemiantes de la insulina y los hipoglucemiantes orales y, asociadas a beta-bloqueantes se potencian los efectos hiperglucemiantes.
Al igual que la furosemida, las tiazidas contribuyen a la depleción de potasio de los corticoides, el regaliz,... Se recomienda monitorizar los niveles séricos de potasio durante la administración concomitante de diuréticos, especialmente furosemida y digitálicos.
La administración concomitante de tiazidas y ciclosporina supone riesgo de hiperuricemia.
Tanto las tiazidas como la furosemida pueden inducir toxicidad por litio, por inhibir su excreción tubular.
Los pacientes tratados con tiazidas a los que se asocia un IECA pueden sufrir una hipotensión grave tras la primera dosis de IECA. La asociación de diuréticos e IECA puede precipitar un fallo renal agudo.
Los diuréticos interaccionan con el alopurinol pudiendo provocar distintas reacciones adversas.
La furosemida incrementa el riesgo de ototoxicidad de los aminoglucósidos y de nefrotoxicidad si se asocia a cefaloridina.
La combinación de tiazidas y diuréticos del asa causa a menudo un deterioro importante de la función renal.
Palabras claves:
- DIGOXINA
- CICLOSPORINA
- OTOTOXICIDAD
- ALOPURINOL
- LITIO
- NEFROTOXICIDAD
- RIESGOS
NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.