Sesión Bibliográfica. 01 de Septiembre de 2001 (29)

El tratamiento de la hipercolesterolemia con dieta y fármacos hipolipemiantes da lugar a una normalización de la función vasomotora del endotelio coronario y a un aumento del flujo sanguíneo a las pocas semanas o meses del tratamiento, que se traduce en una reducción significativa de la morbilidad y mortalidad cardiovascular. Según el National Cholesterol Education Program de USA, es necesario instaurar un tratamiento hipolipemiante agresivo en los pacientes con elevado riesgo de enfermedad cardiovascular, siendo la diana de esta intervención el colesterol- LDL. Los factores de riesgo cardiovascular identificados son: hipercolesterolemia, hipertensión arterial, obesidad, tabaquismo, sedentarismo, dieta rica en grasas saturadas, además de la edad y el sexo. Cuando los cambios en el estilo de vida no son suficientes en la disminución del colesterol-LDL, se recomienda tratamiento con estatinas. La asociación de una dieta pobre en ácidos grasos saturados y colesterol con un hipolipemiante consiguen una reducción del colesterol total en un 40%. La atención farmacéutica en los pacientes con hipercolesterolemia es un punto fundamental en la terapia de estos pacientes, ya que su seguimiento y control, junto con educación de hábitos alimentarios y de vida, ha demostrado que ejercen un impacto positivo, consiguiendo una disminución significativa de los niveles de lípidos séricos, tal como demuestra el trabajo realizado por el grupo de Aterosclerosis del Colegio de Farmacéuticos de Valencia, con 80 pacientes hipercolesterolémicos.
Palabras claves:
  • COLESTEROL
  • ESTATINAS
  • DIETA
  • HABITOS
  • EDUCACION
  • MONITORIZACION
  • SEGUIMIENTO

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.