Sesión Bibliográfica. 01 de Diciembre de 2001 (32)

SINTOMAS: La vaginitis por Trichomonas vaginalis, un protozoario, es una enfermedad transmisible sexualmente. La infección no presenta síntomas en el 50% de los casos, pero éstos aparecen en 6 meses. Entonces la enfermedad se manifiesta por leucorrea amarillo verdosa, quemazones vulvovaginales y molestias. También pueden existir dolores pelvianos bajos. En el hombre, la infección puede ir acompañada de signos de uretritis con flujo y/o disuria. TRATAMIENTO: un tratamiento con metronidazol o con tinidazol , por vía oral, permite obtener la desaparición del parásito en cerca del 90% de los casos, mientras que, con placebo, el parásito persiste en el 75% de los casos. Los 5-nitro-imidazoles, utilizados por vía oral, de 7 a 10 días o en tratamiento por toma única tienen una eficacia parecida. Al contrario, el tratamiento por vía vaginal es menos eficaz que por vía oral. Además, añadir un tratamiento local a la vía oral no parece muy justificado. Un sólo ensayo ha versado sobre el tratamiento de la pareja. En este ensayo, las mujeres cuya pareja había recibido tinidazol en toma única presentaron menos recidivas que aquellas cuya pareja había tomado un placebo (3/59 versus 14/59; p=0.001). DURANTE EL EMBARAZO: el embarazo no justifica la búsqueda y tratamiento de las infecciones asintomáticas por Trichomonas vaginalis. En una mujer encinta o susceptible de estarlo, parece preferible escoger el metronidazol por vía oral que es el tratamiento mejor evaluado durante el embarazo (NdR: el Diccionnaire Vidal 2001 autoriza ya la prescripción de metronidazol en todo el embarazo, en cambio, no lo autoriza el Compendium suizo 2001). En esta situación no existe un elemento decisivo que permita escoger entre un tratamiento largo o un tratamiento en toma única. DURANTE LA LACTANCIA: el metronidazol es el medicamento más estudiado durante la lactancia. En un ensayo con una toma única de 2 g de metronidazol, el pico lácteo se alcanzó 2 a 3 horas después de la toma y la concentración de metronidazol en la leche disminuyó rápidamente durante las 12 horas siguientes a la toma. No se notificó ningún efecto adverso importante en el lactante. El tratamiento en toma única probablemente aporta menos metronidazol al niño a través de la leche que un tratamiento largo y, por tanto, parece preferible. No parece necesario suspender la lactancia en caso de toma única de metronidazol o de tinidazol. En caso de prematuridad, por prudencia, se puede aconsejar sacar y tirar la leche las 12 a 24 horas siguientes a la toma por el riesgo de acumulación en el recién nacido.
Palabras claves:
  • METRONIDAZOL
  • RECOMENDACIONES
  • EFICACIA
  • LACTANCIA
  • EMBARAZO
  • TINIDAZOL
  • DOSIS

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.