Sesionbes Bibliográficas. 01 de Noviembre de 2003 (53)

Las infecciones del tracto urinario son las segundas más frecuentes, tras las respiratorias, en la practica clínica diaria. Son frecuentes en mujeres jóvenes, de modo que entre el 1-3% presenta al menos un episodio, aumentándose la frecuencia durante el embarazo debido a alteraciones anatómicas. Otros factores de riesgo que aumentan la frecuencia de infecciones urinarias son la actividad sexual, la alteración de la flora vaginal y uretral producida por el diafragma o espermicidas, y el uso de anticonceptivos orales o antibióticos. Las alteraciones en el pH vaginal que se observa en la menopausia también predisponen a la infección. En varones por debajo de 50 años dichas infecciones son raras y suele indicar alguna anomalía en el tracto urinario. En varones, los factores de riesgo son las relaciones homosexuales o con mujeres altamente colonizadas. El 1% de los niños, y el 3% de las niñas, también presentaran alguna infección sintomática en los primeros 10 años de vida. La cistitis, infección de la vejiga, es causada fundamentalmente por bacterias que se encuentran en el intestino, como E. coli (90%), Proteus, Klebsiella o Enterobacter, las cuales llegan a la vejiga a través de la uretra y permanecen en ella creciendo con rapidez. Se presentan con presión en la parte inferior de la pelvis, micción dolorosa, necesidad de orinar con frecuencia y urgentemente, color anormal y olor fuerte de la orina. Es más común en la mujer por la corta longitud de la uretra. Otros factores de riesgo son: cambios en la flora bacteriana durante nuevas relaciones sexuales y la presión que sobre la vejiga ejercen los actos sexuales, la colocación del diafragma, o el embarazo. En este último caso puede ser una complicación infecciosa importante y ocasionar riesgo para la madre y el feto. En un 20-30% de los casos de cistitis en mujeres jóvenes presentan recurrencias, que suelen ser (90%) reinfecciones y no debidas a persistencia del foco. Estas recurrencias se dan principalmente en mujeres con algún factor de riesgo. Las uretritis, infecciones de la uretra, se producen por los mismos organismos responsables de las cistitis, o por ETS, como C. trachomatis, N. gonorrhoeae o U urealyticum, o por virus como herpes simple o citomegalovirus. Por ello, son más frecuentes en hombres jóvenes, promiscuos y con practicas de alto riesgo. La sintomatología se caracteriza por dolor al orinar, durante la relación sexual, o abdominal, aumento de la urgencia urinaria, inflamación en la ingle o el pene, secreción vaginal o del pene, fiebre y escalofríos y nauseas o vómitos. La prostatitis, o inflamación de la próstata, se asocia a dificultad para orinar, aumento de la frecuencia y urgencia de las micciones, dolor o molestias en la región genital que se irradia hacia la región lumbar, el recto o la zona situada sobre los genitales o el pubis. Puede estar causada por virus o bacterias, como enterococos, E coli, klebsiella, P. mirabilis, S. aureus, o enfermedades de transmisión sexual. Si no curan bien se pueden cronificar.
Palabras claves:
  • PROSTATITIS
  • PIELONEFRITIS
  • COTRIMOXAZOL
  • URETRITIS
  • AMOXICILINA
  • QUINOLONAS
  • CISTITIS

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.