Sesión Bibliográfica. 01 de Abril de 2004 (58)

Las estatinas han mostrado una reducción de los eventos coronarios y la mortalidad total en pacientes que han sufrido un infarto, lo que parece no depender del sexo, la edad o los niveles básales de colesterol de los pacientes. La falta de cumplimiento terapéutico puede ser uno de los mayores problemas de este tratamiento. Los betabloqueantes reducen el riesgo de muerte, infartos recurrentes no fatales y muerte súbita cardiaca en pacientes que han sufrido un infarto agudo de miocardio. Aún así, hoy en día estos fármacos se encuentran infrautilizados, lo que puede deberse a la sospecha de los médicos de que la incidencia de efectos adversos es mayor de la indicada en los ensayos clínicos, aunque recientes revisiones sistemáticas solo han puesto de manifiesto un pequeño incremento en el riesgo de fatiga y disfunción sexual. Incluso en una reciente revisión de la Cochrane se concluye que no producen reacciones adversas respiratorias. Así, en un estudio sobre 46.000 supervivientes de infarto con asma y enfermedad pulmonar obstructiva crónica tratados con betabloqueantes se ha mostrado una reducción de la mortalidad total de un 40%. Estos fármacos deben ser utilizados con precaución en pacientes con enfermedad arterial periférica severa. Las intervenciones no farmacológicas son también muy importantes en el tratamiento de los pacientes que han sufrido un infarto. La más importante de estas será el abandono del hábito tabáquico, que reduce en un 50% la mortalidad y los eventos cardiacos secundarios, por lo que debe ser una prioridad en todos estos pacientes, incluidos los ancianos. También se deben tratar los problemas psicológicos asociados al infarto, puesto que un 15-20% de los pacientes sufren depresión, lo que puede asociarse con un aumento de la mortalidad, aunque no se sabe el mecanismo por el que ambas patologías se asocian.
Palabras claves:
  • TABACO
  • BETABLOQUEANTES
  • MIOCARDIO
  • ESTATINAS
  • INFARTO

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.