Sesionbes Bibliográficas. 01 de Diciembre de 2004 (65)

Desde hace más de 40 años se sabe que una prolongación excesiva - inducida por medicamentos - del intervalo QT puede producir trastornos del ritmo potencialmente mortales del tipo ""torsades de pointe"" (TdP). A pesar de las frecuentes notificaciones de dichos efectos adversos, este problema se ha descuidado durante mucho tiempo e incluso se ha considerado por muchos como clínicamente insignificante. Esta opinión se ha modificado radicalmente: muchos medicamentos críticos a este respecto han sido retirados del mercado (terodilina, lidoflazina, sertindol, grepafloxacina, cisaprida, droperidol) y la lista de medicamentos de indicación no cardiológica que prolongan el intervalo QT y pueden desencadenar TdP no cesa de crecer. Además, estudios científicos analizan de forma intensiva los mecanismos genéticos y electrofisiológicos de la repolarización miocárdica, así como su inducción por medicamentos y enfermedades congénitas (síndrome QT congénito). La probabilidad de un efecto adverso del tipo TdP depende de la substancia. Con sotalol, un antiarrítmico de clase III, 2-4% de los pacientes sufren trastornos del ritmo del tipo TdP. Con medicamentos de indicación no cardiológica, la frecuencia de dicho efecto adverso es netamente menor (1: 100000 a < 1 : 1000000). Es imposible indicar con precisión la frecuencia con que aparecen TdP con uno u otro medicamento, pero hay que tener en cuenta que existe un número importante de casos no contabilizados. Se estima que cerca de 10-20% de los pacientes que desarrollan una prolongación excesiva del intervalo QT inducida por medicamentos fallecen a consecuencia de TdP.
Palabras claves:
  • QT
  • TdP
  • sotalol
  • antiarrítmico
  • terodilina
  • idoflazina
  • sertindol
  • grepafloxacina
  • cisaprida
  • droperidol

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.