El tratamiento sistémico del acné es generalmente más efectivo que el tópico.
Los antibióticos están indicados en pacientes con acné inflamatorio moderado o grave, o para aquellos pacientes que no toleran el tratamiento tópico, o éste ha fracasado.
Los antibióticos orales utilizados en el tratamiento del acné incluyen tretaciclinas, eritromicina (ambos con propiedades antiinflamatorias) y cotrimoxazol.
La tretaciclina es el antibiótico de primera línea. La dosis usual es 250-500 mg, dos veces al día, durante 6 semanas. Sus efectos adversos más frecuentes son gastrointestinales y candidiasis vaginal. Debe tomarse con el estómago vacío.
La doxiciclina (100mg/12 horas) o minociclina (50-100mg/12 horas) son buenas alternativas a la tretaciclina, con mejor tolerancia gástrica. Pueden tomarse con las comidas. La minociclina puede producir alteración vestibular reversible, por ello se recomienda iniciar el tratamiento con dosis bajas.
La eritromicina (500mg/12 horas) produce frecuentemente intolerancia gastrointestinal y su eficacia es cada vez menor debido a la aparición de resistencias de los microorganismos del acné.
El cotrimoxazol (160-800 mg/12 horas) es efectivo contra el acné, sin embargo posee efectos adversos potencialmente graves como reacciones de hipersensibilidad y aplasia medular.
El tratamiento con antibióticos orales debe durar de 4 a 6 meses. La mejoría clínica no se obtiene hasta los 3-4 meses.
Palabras claves:
- DOSIS
- INDICACIONES
- EFECTOS-ADVERSOS
- ERITROMICINA
- TETRACICLINAS
- DOXICICLINA
- ADMINISTRACION
- EFICACIA
- COTRIMOXAZOL
NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.