Sesionbes Bibliográficas. 01 de Enero de 1998 (9)

Los fármacos antiepilépticos se ven frecuentemente asociados a interacciones farmacológicas. Aunque en el tratamiento antiepiléptico se intenta utilizar monoterapia, no siempre es posible. Además, como el tratamiento con antiepilépticos suele ser prolongado, durante este tiempo pueden asociarse otros tratamientos. Todo ello implica un alto riesgo de aparición de interacciones, tanto farmacocinéticas (por inducción o inhibición de los enzimas hepáticos y por desplazamientos de su unión a proteínas plasmáticas) como farmacodinámicas. Los antiepilépticos inductores hepáticos más potentes son fenitoína, fenobarbital y carbamacepina. La lamotrigina es un inductor menos potente. El ácido valproico es un inhibidor enzimático de una amplia gama de enzimas. La gabapentina y vigabatrina no son ni inductores ni inhibidores enzimáticos. Las interacciones debidas a desplazamiento de las proteínas plasmáticas suelen producirse en tratamientos con fenitoína y ácido valproico. Este tipo de interacciones son previsibles cualitativamente, aunque no cuantitativamente, ya que la magnitud de la interacción presenta gran variación interindividual. Por tanto, el farmacéutico puede anticiparse a ellas y monitorizar al paciente en el momento que sea previsible una interacción por terapia antiepiléptica.
Palabras claves:
  • EFICACIA
  • MONITORIZACION
  • FENOBARBITAL
  • CARBAMACEPINA
  • VALPROICO
  • TOXICIDAD
  • LAMOTRIGINA
  • FENITOINA
  • INDUCTORES
  • INHIBIDORES
  • RIESGOS

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.