Sesionbes Bibliográficas. 01 de Enero de 1998 (9)

Los corticoides inhalados son considerados actualmente el medicamento de primera elección para la profilaxis o control del asma persistente. La potencia antiinflamatoria antiasmática no tiene parámetros directos de medida, pero se acepta que tiene relación con el efecto antiasmático, medido a través de parámetros como el volumen espiratorio forzado el primer segundo, el flujo espiratorio máximo... La potencia antiinflamatoria relativa de los corticoides inhalados va en el siguiente orden: beclometasona dipropionato = budesonida < fluticasona. Los estudios sobre la actividad sistémica parecen confirmar este orden. Actualmente no existe evidencia de mayor eficacia de cualquiera de los corticoides inhalados si se usan a dosis equipotentes. Los riesgos de producir efectos sistémicos son iguales administrados en forma de inhalador presurizado con espaciador que en polvo inhalado, también a dosis equipotentes. Los sistemas de liberación/administración pueden afectar la actividad tanto tópica como sistémica. La cantidad de fármaco que alcanza el pulmón varía según el sistema de administración utilizado y según el medicamento. Para cada paciente se elegirá el método de administración más adecuado a sus características y la dosis se ajustará según la respuesta. Los corticoides más potentes podrían tener mayor aceptación puesto que requieren menos inhalaciones y favorecen el cumplimiento, pero aún no existen datos que nos permitan afirmar que ello implique mejor relación coste-efectividad.
Palabras claves:
  • EFICACIA
  • CUMPLIMIENTO
  • COMPARACION
  • ASMA
  • ADMINISTRACION

NewsLetter de abstracts redactados por expertos del programa y con la colaboración de profesionales de la salud que trabajan en diferentes ámbitos asistenciales.